Si mallas mal, calculas mal. Si no sabes qué elemento es el apropiado, calculas mal. Si no controlas el mallado, no calcularás adecuadamente. Lee esto.
El tercero de los enemigos ocultos del ingeniero: la resonancia. Causante del fallo de muchos equipos y estructuras sin haber sido conscientes de ello. ¡Estudia con un análisis modal y adelántate a este temible adversario!
No basta con diseñar un chasis, ¡hay que validarlo estructuralmente! Y un cálculo por elementos finitos es la mejor forma de hacerlo... ¡Por expertos, siempre!
En determinadas circunstancias, realizar un cálculo no lineal en lugar del lineal, más barato y rápido, puede ahorrarte miles de euros. ¡No lo desestimes por el precio!